10 oct 2010

KIRSCHBLUTEN Y EL BUTOH: ¡mamá hay una japonesa en la pantalla!

Kirschbluten
     
    Puse play y de la nada ¡CABÚM!. No me lo esperaba ni remotamente. El título prometía otra película de amores truncos o de manual de filosofía de goma. Pero no. Es un drama que, si bien dispara (y pega duro), no apunta a la cosa sensiblona-melosa. Es de una directora alemana, Doris Dörrie, y salió en el 2008. No quiero decirles mucho más porque le sacaría la gracia. Si están interesados les recomiendo que la vean.

Trailer: http://www.youtube.com/watch?v=KmdDkE8RGm8&feature=related



BUTOH

      La templanza del  monje shaolin  mezclada con los movimientos espásticos de un perro caniche dan por resultado una de las expresiones más sofocantes que vi. El BUTOH. No podría ser definida como danza, es una mezcla de teatro mudo en el que el actor-bailarín grita con el movimiento extremadamente dramático e intenso de su cuerpo. Como buena persona que un domingo a la tarde cultiva gas metano me dispuse a chusmear de qué se trataba. 
    Para sorpresa de varios (en los que me incluyo), no se trata de una tradición milenaria japonesa. El butoh recién va por su cumpleaños número 51. Nació en la década del 60 junto a  Kazuo Ohno (1906-2010)  y (uia qué difícil está escribirlo)  Tatsumi Hijikata (1928-1986), obviamente en Japón. 
Kazuo Ohno
   
   El butoh es una expresión descarnada que explora todo tipo de movimientos y contorsiones del cuerpo humano. Su premisa es que cualquiera puede bailar butoh. Vos en tu casa podés bailar butoh. Tu verdulero amigo también. En general se baila desnudo con el cuerpo pintado de blanco, pero no hay reglas estrictas.(Esperemos que el verdulero no se cope.) Puede estar acompañada de música, pero es preferible el silencio como elemento dramático contracturante. La única regla de la danza es que no tenga sentido aparente, que sea improvisada en base a las sensaciones que el bailarín sienta en el momento. No narra una historia. Esta danza performática materializa a través del cuerpo lo inesperado, lo espontáneo. Y hace que los espectadores, al igual que el bailarín-actor, se estremezcan tanto de placer como de horror. (No por nada butoh significa danza de las tinieblas). Por momentos se apropia de la dulzura de las flores del cerezo para instantáneamente mutar en el reptar desgarrador de un animal fantástico. Va de la A a la Z. 
    Como el arte no sale de un repollo, aunque muchos no lo crean así, no es tan descocado establecer una conexión entre el butoh y los efectos atroces de la II Guerra Mundial en el colectivo de las mentes niponas...


Para ver:



3 oct 2010

¿Y el arte americano?

Para comprender el por qué del abandono del arte americano antiguo hay que ir al grano (¡y qué grano molesto!) de la historia del arte…


MUY Brevemente: la historia del arte nació junto al humanismo durante el Renacimiento. Ésta era un estudio de la historiografía renacentista, y allí se gestaron los cánones occidentales que acapararon los posteriores estudios del arte.
Recién en el siglo XVIII y principios del XIX, comenzaron a clasificarse otras civilizaciones. Esto fue promovido por la Estética, quien se encargó de separar a los objetos “estéticos” de los funcionales, sociales y religiosos. Por un lado, La estética permitió la apreciación del arte “arcaico y exótico”, hasta ese entonces desconocido *1. Pero, por otro lado, las ideas kantianas de la Estética acarrearon el problema de considerar la producción artística no-occidental en términos occidentales.
 Debido a la preferencia por el arte clásico occidental, desde el siglo XIX las teorías evolutivas  sostuvieron que en el arte se da una progresión estilística desde la abstracción hasta el naturalismo. Dicho burdamente, una patética evolución desde los garabatos hasta La Gioconda. Dentro de esta corriente de pensamiento, el arte no occidental fue considerado “primitivo” por ser no naturalista y no adaptarse a sus secuencias evolucionistas lineales. Particularmente en cuanto al estudio del arte en América, en el siglo XVI las únicas expresiones originarias que se celebraron fueron la arquitectura y la ingeniería, especialmente la arquitectura monumental de las culturas aztecas e incas. Mientras que las demás artes fueron vistas como imágenes paganas. Inclusive aún en 1900, la crítica decimonónica del arte no logró valorar la fuerza expresiva del arte amerindio, sino hasta 1910 cuando aparecieron críticos capaces de penetrar en las técnicas expresivas del arte figurativo de América. Entre ellos se puede mencionar a Kugler, historiador del arte alemán y creador de la doctrina independista de la cultura americana. Él fue el primero en estudiar al arte americano como autónomo e independiente de las influencias del viejo mundo.
En el siglo XX, el modernismo se erigió a partir de la negación de la representación clásica occidental gracias a las vanguardias históricas, quienes  encontraron inspiración en los estilos primitivos. En ese momento comenzaron a revalorizarse tradiciones artísticas no occidentales, como las de África y Oceanía. Sin embrago, la postura de las vanguardias con respecto al arte de América aún hoy es discutible.*2
            
         Lamentablemente el Occidente está tan comprometido con la herencia del arte clásico que en cualquier cosa que los occidentales vean, ven algo que se le asemeja.Es por esto que para tratar un arte extraño a la tradición occidental, todo lo que no encajaba en el marco de las “bellas artes”, establecido desde el Renacimiento, marginalmente se transformó en “decoración” o “artes aplicadas”. Un ejemplo claro de esto, es la opinión de los historiadores sobre los materiales de la arqueología americana que considera a sus productos estéticos como meros valores simbólicos de adorno. De esta manera, el discurso occidental del arte implícitamente esconde la idea de subordinación del ornamento como agregado de la expresión artística. Pero hay que tener claro que las artes que no responden a las convenciones de la perspectiva unilateral europea no pueden estar atadas a la legislación europea  sobre lo “correcto”.  Es por esto que designar la producción simbólico-visual de una cultura no europea, con un término que en la nuestra es “menos”  que arte es, por lo menos, engañoso. Y en última instancia, representa un caso más de la epistemología hegemónica que en el presente mundo poscolonial ya no puede sostenerse. 















Notas:
*1: ello es producto del aporte de Kant con su idea de “lo sublime” y de la universalidad del juicio estético (que plantea que el gusto es algo innato e igual para todos no importa a qué cultura pertenezcas)ß esto es más que discutible.


*2: Hay quienes defienden que el arte americano antiguo no fue de interés para el arte vanguardista puesto que éste incluye ejemplos de arte figurativo. Sin embargo, desde la perspectiva de otros autores, las vanguardias del siglo XX revaloraron la abstracción de los antiguos textiles y cerámicas de América.

Sonido Antiguo, Abstracto en Negro (1925), Paul Klee
 Óleo sobre cartulina. 38.1 x 38.1 cm.Kunstsammlung. Basilea
. 


Textil peruano.

Arte

Obra de arte. ¿Qué es arte? Se piensa que el arte es algo casi mágico, inalcanzable, producto de genios. Se le quieren dar definiciones que siempre van a quedar vagas, rígidas y caducas. 

La imperiosa necesidad de medir y clasificar cosas, llevó al hombre  moderno occidental a buscar definiciones para todo.  Es ese amor por los envoltorios, por las máquinas lustrosas, por lo cuantificable y por la explicación racional.  Bendita Ilustración que con sus grandiosas enciclopedias no enseñó acerca de la reproducción de la oruga de Malasia. Todo muy bonito, pero ¿qué pasa cuando algo no encaja en las etiquetas? 


"Mierda de artista"(1961)de Piero Manzoni.
El arte tiene muchas definiciones. El arte no se define solamente por una corriente de pintura, o un grupo de cineastas. El arte es inefable.  Entonces “¿qué coño es el arte? “Me diría una señora con un gesto de impaciencia mientras le impido ver la escena del beso de la novela de la tarde. Calma señora, no es que el arte no tenga definición, sino que no hay una única definición válida. El arte se hace. Y hay tantas definiciones como artista y como espectadores haya en el mundo.  Entonces, lectores, ¿en qué quedamos?. Esto no es un viva la pepa, eh.  Como han pensado algunos que guardaron caca en una lata, la firmaron y la pusieron a la venta.  (Aunque pecaría de mentirosa si digo que  estoy en contra de la crítica al arte burgués que hizo Piero Manzoni con su obra “Mierda de artista”).





Así, desprolijamente, empiezo el blog.